El documentalista Michael Moore publicó un
texto en su web titulado: “5 razones por las que Donald Trump ganará las elecciones”,
en el que plantea las ventajas del republicano sobre Hillary Clinton.
Señala:
“Les dije que Trump ganaría la candidatura republicana y ahora tengo que darles
una noticia aún más terrible y deprimente: Donald J. Trump ganará en
noviembre”.
He aquí un resumen de los argumentos por las que él afirma que Donald triunfará en las elecciones presidenciales a realizarse el 8 de noviembre:
1. Para la clase obrera será un aliado pues ven en Trump
una esperanza para la crisis y rezagos económicos que han enfrentado por años
muchos estados industriales yanquis.
2. Es un hombre blanco y ello le hará contar con apoyo de
un numeroso grupo de hombres que ven como una amenaza del creciente poder de
las mujeres, gays y miembros de otros grupos étnicos en la política, economía y
la sociedad estadounidenses.
3. Las políticas de Clinton representan la vieja guardia
de la política norteamericana, una especie de protofascista, e inspira suspicacia
por sus cambios de postura sobre temas cruciales como el matrimonio gay y la
guerra.
4. Los simpatizantes de Bernie Sanders (su compañero de
fórmula), no están convencidos de votar por Hillary y votarán por una tercera
opción.
5. Algunos votarán por Trump para demostrar hartazgo al
sistema político estadounidense.
Independiente de lo expuesto por Michael
Moore, como ya se mencionó en este blog antes, que así como los mexicanos eligieron
a peña nieto, los panameños a Varela, los argentinos a Macri, los brasileños no
defendieron a Rousseff, los españoles reeligieron a Rajoy y en breve los
venezolanos, los peruanos y los cubanos se ofrecerán en charola de plata a la
derecha mundial; debemos entender que el posible triunfo de Donald Trump es un
reflejo de la crisis ideológica a nivel mundial y la falta de conciencia política
(insisto: no es privativo de los yanquis”), pero ello a su vez es un gran logro
de los medios masivos de manipulación que hacen ver siempre a todo proceso
electoral como una contienda deportiva: el fuerte contra el mañoso, tu equipo contra
el mío, el guapo contra el feo, el tonto contra el listo o el bueno contra el
malo… aunque al final los perdedores siempre sean los millones de ingenuos que
creen que al votar están decidiendo sobre su destino…